Los planes que teníamos con nuestros amigos se anularon y acabamos en casa sin saber que hacer. Noté a mi novia con ganas de sexo y se me ocurrió usar la cámara para grabar un vídeo porno. A los dos nos pareció una idea muy cachonda y al final, la dejamos apuntando al sofá mientras nos centrábamos en gozar. Fue una de nuestras mejores folladas y terminé dándole a cuatro patas, mientras azotaba su culo.