Como nunca tiene tiempo para limpiar, este chico quiso contar con una sirvienta para que se pasase por su piso e hiciera tareas de limpieza. Pero tras un par de visitas, empezó a ver a la señora con otros ojos y quiso tantear el terreno con ella para quizás follársela. Parece que la madura estaba muy por la labor y al final, dejó lo que estaba haciendo para sacarle brillo a su polla y terminar gozando de la polla de ese jovencito.