Antes de meterse en la bañera para darse un baño, esta golfa rusa tuvo un momento íntimo con su pareja. Los dos empezaron a meterse mano y al final, la chica se apoyó en la bañera para dejarle penetrar su coño. No paró de gemir mientras él lo grababa todo, hasta tenerla cara a cara y abierta de piernas pidiéndole que continuase. Fue una follada casera increíble y acabó con el chico eyaculando sobre su coño, dejándola con una sonrisa de oreja a oreja tras semejante polvazo casero.