Tocaba noche de sexo y mi chica quiso que lo grabase todo en vídeo. Conseguí un primer plano de su coño y empecé a follármela, mientras ella estimulaba su clítoris con un vibrador. Fue un placer para los dos y la escena casera fue bastante sensual, hasta que no pude aguantarme más y acabé corriéndome en sus pies, algo que siempre ha sido un fetiche muy personal.