Últimamente llevo una mala racha de sexo y no consigo encontrar a un hombre que me folle como a mi me gusta. Quise hablar de ello con mi hermanastro, pero tras fijarme bien en él, pensé en pasar a la acción. Me empezó a generar mucho morbo la idea de follármelo y al final, no le dejé escapar de la cocina hasta conseguir que me metiese la polla y soltase toda su lefa sobre mis pechos, en un polvo que al fin me dejó más que satisfecha.