Era el cumpleaños de mi padrastro y como mi madre estaba fuera, quise ser muy juguetona y hacerle un regalo muy especial. Le dejé algunas notas y le llevaron a un vibrador, el cual quise que cogiese para luego venir a mi cuarto y usarlo en mi coño. Me puse cómoda y empezó a masturbarme, para luego dejarlo de lado y sacarse la polla, convirtiendo ese regalo en una follada incestuosa que duró toda la tarde.