Parece que Veronica Avluv necesita que alguien limpie su casa y la milf recurre a uno de sus asistentes, que pronto se pone manos a la obra con la aspiradora. Pero mientras lo hace, el tipo no puede evitar fijarse en los pechotes de esa diosa y como no, ella decide aprovechar. De repente se levanta y se los pone en bandeja, hasta ponérsela bien dura y lista para el polvazo que finalmente se marcaron en el sofá del salón.