Un cuerpazo como el que gasta la milf Kendra Lust solo se mantiene con mucho ejercicio, por eso acude al gimnasio casi a diario para quemar calorías. Aunque hoy la morena termina sudando con algo mucho mejor, ya que utilizó esos pechotes tan ricos que tiene para seducir a su entrenador. El tipo no pudo resistirse a sus tetazas y como vemos, terminó dándole duro por todo el gimnasio y haciendo que sudase mientras montaba sobre su rabo.